Con el río Tajuña como estandarte y compañero, Valderrebollo es un pequeño pueblo de La Alcarria donde prima la sencillez de sus calles y casas, la paz y el silencio. Tres características que se aderezan con olores a plantas aromáticas y senderos muy especiales.

Este pueblo, de 25 habitantes y situado a 43 minutos de Guadalajara, es un lugar ideal para practicar la pesca. Entre sus atractivos turísticos se encuentra la Iglesia Parroquial Nuestra Señora de La Leche, cuya portada es ejemplo de arte románico alcarreño del siglo XII. También destaca la picota o rollo jurisdiccional del siglo XVI ubicada en la Plaza, el lavadero, las fiestas patronales o la comida popular del mes de septiembre que sirve para fortalecer los lazos entre los vecinos de este entrañable pueblo.

Vivir en un pueblo afectado por la despoblación también conlleva ventajas fiscales como las deducciones de un 25% en la declaración de la renta por residencia habitual o efectiva. Valderrebollo cuenta con algunas viviendas disponibles y también con terrenos rústicos que son propiedad del Ayuntamiento y que hacen factible la posibilidad de mudarse a esta localidad.

El pueblo posee una pista polideportiva y una pista de pádel, además de aparatos de gerontogimnasia y parques infantiles, un centro social y un bar. La conexión a Internet es a través de 3G. Su cercanía a Brihuega o Cifuentes, dos de los municipios más grandes de la comarca, hace que los habitantes de Valderrebollo puedan acceder a todos los servicios que necesiten desplazándose unos pocos kilómetros.

Valderrebollo te ofrece numerosos motivos para que puedas empezar una vida más saludable en un entorno rural privilegiado.